viernes, 5 de febrero de 2016

“El cambio climático está acabando con la vida de los inuits y casi me cuesta la mía en Groenlandia”



Tenía que haber sido un ejercicio de supervivencia controlada entre los hielos de Groenlandia, pero el cambio climático y unas condiciones meteorológicas atípicas y especialmente cambiantes han estado a punto de costarle la vida a Carlos Vico, especialista en supervivencia extrema y cliente de Impart.

Después de unos días de aclimatación y contacto con los inuits –la etnia de cazadores de Groenlandia- Carlos inició su recorrido en solitario por los hielos de la isla el sábado 23 de enero; concretamente en la región de Tasiilaq. La idea de la expedición en solitario era hacer un ejercicio de supervivencia extrema: realizar un recorrido durante cuatro días, llevando exclusivamente como equipamiento una pala, un cuchillo, una cantimplora, un piolet y un mechero.

Durante los dos primeros días, Carlos completó su travesía: se alimentó con carne de foca, consiguió obtener agua para beber y fue capaz de dormir caliente en medio del hielo, construyendo a diario un “refugio de nieve”, donde la temperatura interior es de unos 8 a 10 grados.

Pero el lunes 25, tercer día de recorrido, las condiciones meteorológicas y climáticas cambiaron súbitamente: una tormenta elevó el nivel de la nieve más de un metro, haciendo prácticamente imposible avanzar, a la vez que una espesísima niebla impedía casi por completo la visibilidad.

Conectado en todo momento con Carlos por teléfono satélite, el equipo de apoyo le comunica ese mismo día que debido al empeoramiento del tiempo y a la previsión de tormenta, se activa el protocolo de evacuación de emergencia, consistente en la recogida en helicóptero. Pero la niebla impide el despegue y Carlos vuelve a pasar la noche en un nuevo refugio de nieve, esperando la evacuación al día siguiente.

Pero al día siguiente (26 de enero) la niebla impide la maniobra aérea, por lo que la organización decidió enviar equipos de evacuación con motonieves. La fortísima nevada caída impidió la llegada de este primer equipo de evacuación; tampoco era viable ir en su búsqueda con trineos de perros y es entonces cuando llegan los problemas graves: Carlos se dirige hacia el valle para facilitar la recogida por parte del equipo, pero se resquebrajó parte del camino por el que avanzaba y cayó al agua helada.

En aquel momento, se le notificó que el equipo de motoristas estaba en camino pero que avanzaba muy lentamente por la tormenta de nieve. Entonces, Carlos tuvo que emplear a fondo todos sus recursos de supervivencia para evitar la hipotermia, antes de que llegara un equipo de evacuación. Lo consiguió creando una vela a base de grasa de foca y kleenexs. Como combustible usó toda la ropa que tenía: con el calor de la vela , se calentaba y secaba ropa húmeda, que a su vez le sirvió como combustible para ir secando más ropa cuando se le acabó la grasa de foca. Con este procedimiento fue capaz de aguantar sin congelarse hasta que finalmente llegó el equipo de motonieves: “tardaron siete horas en llegar, pero afortunadamente el viaje de vuelta fue el doble de rápido porque utilizamos la vía abierta a la ida, lo que facilitó mucho el regreso”, comenta Carlos Vico una vez aterrizado en Barcelona, donde se encuentra descansando tras su extenuante aventura.

Según su relato, los propios cazadores inuits están sorprendidos de las extrañísimas condiciones climáticas de Groenlandia durante este año: se han roto los hielos permanentes de sus hábitats, anegando los ancestrales caminos de hielo del invierno y dispersando la población de focas, base de su sustento. “He intentado caminar por los hielos que han pisado innumerables generaciones de inuits, pero este año, esas vías tienden a ser líquidas: el cambio climático está acabando con el modo de vida de un pueblo que lleva casi mil años en Groenlandia: a mí, pudo haberme costado la mía”.

Todo el viaje de Carlos Vico ha sido monitorizado en abierto en internet a través de su señal de GPS; puede seguirse toda su ruta en la web de Survival Xtrem

No hay comentarios:

Publicar un comentario